sabés los
derroteros de mi mente, fugaz detrás de la estrella,
colita de
cometa serpenteando más allá de mí
por favor
no la detengas, no la inviertas,
se
desvanece con un soplo, dejame irme de vos, de mí,
de toda
esta sensación de estar viviendo en la nieve del congelador
suspendida
entre iglúes de cariño y platos de sopa
dejame irme
no me extingas la belleza de estar loca
quiero
salir por el tiro de la chimenea de mi alma hacia el silencio
sin dejar
huellas para que nadie me rastree
ni me grite
desde lejos volvé, volvé, mirame un poco, hablame
porque soy
deseosa del silencio y de la copa de los árboles
donde
pacerme como un ave, apocarme como un colibrí,
rezumar el
destello acuático como una gota
espesarme y
desvestirme como un animal terrible, insecto camaleónico,
dejame
romperme como una mica en la arena
estrellarme
sonrosada nube heroica estratus limbus
quiero
sembrarme de césped y dormirme a lo largo del río
ser el
cuenco y ser la noche dinamitada de luna
quereme
lejos y quereme nunca, estoy partida
naciendo y
muriendo solita, solita, fénix de silencio
dando de
beber a mi corazón en la montaña. por favor,
no me
detengas.
3 comentarios:
la otra vez estaba leyendo algo muy lindo de rumi que hablaba de cómo los poemas son entidades que representan la verdadera escencia de lo que somos al momento de escribirlos... es muy complicado.. así que capaz que rumi decía otra cosa y yo lo interpreté como más me gusta... digo, todo esto hablando de tus poemas, sobre todo de estos dos últimos chau
capricornio, imparable.
agarré un libro de rumi, edición y prólogo del maese Grinberg, de mis épocas de correctora, y entiendo la percepción, la intuición que tenés. es así, seguro, como vos lo entendiste. estos dos últimos poemas son momentos, y son fotografías de un momento. gracias. golazo el libro.
anónimus, imparable.
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