forcejeo,
dolor nupcial, encandilamiento
es la
escalante mujer que sigue persiguiendo lo inexplicable
tiene
ampollas en la carótida de tanto aullar
excitando
los clítoris del recuerdo, se regurgita
bajo el sol
elástico del verano, con un cordel de barrilete
remonta
puntos suspensivos de cartitas color café
donde
declaraba un amor hervido, ollas a presión
silbando
canciones de moda. la escalante
permanece
en vilo, cavilante clavícula en escorzo.
estamos por
desear lo indeseable, le digo,
pero ella
mira para otro lado.
2 comentarios:
volviste con todo! qué alegría leerte. un abrazo
gracias! sigo con más. vuelva siempre, anónimo. un abrazo.
Publicar un comentario